Viernes tarde, preparándome para una cena con los amigos, escuchando las noticias, y de pronto...ataque de indignación.
Sigo sin entender cómo se puede jugar con los sentimientos, las ilusiones y los sueños.
"Erase una vez una joven pareja que anhelaba tener un bebé. Un día, por fin, su sueño se hizo realidad y la joven quedó encinta. Su humilde casita daba a un campo lleno de canónigos y a la joven se le antojaron. Pero el campo era de una vieja hechicera, la Dama Gothel.
Los días pasaban y la joven no comía, solo miraba por la ventana suspirando.
Empezó a perder peso y cayó enferma.
Entonces, su angustiado esposo, decidió arriesgarse y en mitad de la noche entró en el campo de la Dama y robó unos cuantos canónigos.
Cuando el joven se disponía a salir, la dama lo descubrió. El joven le suplicó y explicó el porqué de encontrarse en sus tierras. La anciana le perdonó no si antes pedirle algo a cambio: Cuando el bebé naciera se lo entregarían.
Llegó el día del nacimiento. Era una niña preciosa. La pareja estaba feliz, pero la dicha les duró poco. La Dama Gothel llegó a reclamar lo que era suyo y se llevó a la pequeña, a la que llamó Rapunzel.
Cuando Rapunzel cumplió los doce años, la hechicera la encerró en la una torre en medio del bosque.
La anciana la visitaba todos los días llamándola así: "Rapunzel, Rapunzel, lanza tu larga trenza"
Pasaron los años y el príncipe del reino había salido de caza cuando escuchó una hermosa melodía. Siguiendo la hermosa voz, vio a Rapunzel en la única ventana de la torre y se enamoró de ella -Desde luego, con que facilidad se enamoraban antes-.
El príncipe buscó la manera de subir la torre pero no había ni puerta, ni escalera. Así que decidió volver al día siguiente. Fue entonces cuando vio como la anciana llamaba a Rapunzel. Escondido entre los arbustos, espero a que Dama Gothel se marchara para llamarla:
-Rapunzel, Rapunzel, deja caer tu trenza!
Rapunzel lanza su trenza y el príncipe sube. Es entonces cuando ambos se enamoran y él le pide que se case con él. Pero primero deben de encontrar la forma de escapar.
El príncipe, entonces, idea un plan. Todos los días le llevará seda para que ella teja una escalera y así, poder escapar.
Pero la anciana bruja los descubre y llena de furia le corta el pelo a Rapunzel y la deja sola en mitad de la nada, perdida y desolada.
Cuando el príncipe acude, la bruja le lanza la trenza. El joven se queda aterrado y la bruja le dice que nunca volverá a ver a Rapunzel, atacándolo y dejándolo ciego.
Años más tarde, el príncipe vagaba triste y desolado por el reino cuando escuchó una hermosa voz: ¡Era la de Rapunzel!
Por fin estaban juntos y ambos rompen a llorar y son las lágrimas que vierte Rapunzel los que le devuelven la vista al príncipe...
Viviendo felices por siempre jamás."